10 octubre 2006

En Silencio


La gente le teme al Silencio. La gente escapa del Silencio. A la gente le da miedo el Silencio. ¿Por qué?

Porque en el Silencio estamos sólos. Con nuestros miedos, con nuestras penas, con nuestras rabias. Con aquellos pensamientos que no queremos pensar. Aquellas ideas que queremos borrar. Aquellos recuerdos que no queremos recordar. Aquellos que surgen sólo cuando estás en Silencio.

Cuando no hay ruido a nuestro alrededor, es cuando pensamos. Y pensar, en Silencio, es peligroso. Porque nos encontramos con nosotros mismos; con quienes realmente somos. No con quien aparentamos ser cuando estamos con otras personas. No la amiga, no la polola, no la hija o la madre o la nieta. Si no que contigo mismo. Con el ser, la persona individual que eres. Sin la máscara que llevamos a diario. Sin la cubierta que nos protege.

En Silencio no queda otra que pensar, que recordar, que soñar. Es inevitable que lleguen palabras a tu cerebro; que tu alma te hable, te susurre, aunque no quieras escucharlo. Que recuerdes que te portaste mal con alguien; que te mintieron, que te hicieron llorar. Que trataste mal a una persona sólo por hacerlo sentir mal, sentir que te equivocaste y que no tienes la fuerza para pedir perdón. Y viene la culpa y la desolación, y las ganas del Ruido. Y prendemos la tele aunque no la estemos viendo; o ponemos la radio aunque no queramos escuchar música. O nos ponemos a escribir en nuestro blog, y a escuchar el sonido de las teclas... pero ya estamos haciendo algo; ya no hay Silencio; ya no estamos solos.

¿Por qué no poder estar un día en silencio? ¿Por qué siempre hay que estar distrayéndose con algo? ¿Siempre hay que estar haciendo algo?

A mi me gusta el Silencio, en algunos casos. Debo admitir que muchas veces escapo de él; me alejo de la soledad implícita que viene junto con el Silencio. Pero me han pasado cosas buenas en Silencio. Me gusta que me mires en Silencio (las miradas dicen más que mil palabras). Un gesto en Silencio es mucho mejor que un te amo hablado. Un beso en Silencio; una caricia en Silencio.

Cuando se ama de verdad, y estás realmente compenetrado con esa persona, se tiene la capacidad de estar en Silencio. La capacidad de mirarse sin hablar, y entender lo que te quiere transmitir el otro. Una sonrisa dice mucho más que un me haces feliz. Un abrazo dice mucho más que un te quiero.

Por eso me gusta estar contigo en Silencio... por eso me gusta cuando me miras en Silencio. Por que en Silencio soy yo.

...Aprendamos a disfrutar del Silencio...


2 comentarios:

Anónimo dijo...

wow!!!

hermosisimo...
no se de donde sacas tantas ideas para escribir cosas tan bellas y ciertas...
bueno...
en realidad hace tpo que yo no escribo y tal vez por eso siento que te envalas de una manera maravillosa...
a veces hace falta inspiracion...

bueno
referente a tu texto...
nada que decir
lo dices todo y concuerdo en todo...
solo creo que el silencio no tiene porque involucrar tantas cosas negativas...
es cuestion de tener la conciencia tranquila...
si no ahi viene ella a reclamarte por tus actos

yo disfruto estar solo y en silencio
y estar en silencio contigo mas lo disfruto...

ya
te amo

besos

xao!

Anónimo dijo...

No hay mejor argumento que el silencio...

Salu2